La crisis originada por la pandemia del coronavirus está creando una nueva crisis económica, peor que la que veníamos arrastrando desde el año 2007. El coronavirus se está convirtiendo en una excusa para todo, entre ellas, para echar a muchas personas de sus puestos de trabajo, que unido al obligado cierre de muchas pequeñas y medianas empresas, ha incrementado el paro en nuestro país. En esta ocasión, es una empresa propiedad de General Electric la que quiere despedir a sus casi 400 trabajadores de Ponferrada.
La filial de General Electric quiere despedir a las 393 personas de su planta de Ponferrada
Una de las empresas que ha aprovechado la crisis por la pandemia para despedir a sus trabajadores es LM Windpower, una filial de la importante General Electric. La empresa ha anunciado ya el despido de 393 personas en su planta de Ponferrada, la capital de El Bierzo. Los trabajadores están convocando protestas y todas las administraciones así como los partidos políticos están apoyando esta justa causa.
Los trabajadores han organizado piquetes y manifestaciones para evitar este despido masivo
El pasado lunes los trabajadores bloquearon la entrada de la fábrica perteneciente al grupo General Electric con numerosos coches, evitando así que se pudieran transportar las palas eólicas. Esta fábrica está situada en el polígono de La Llanada de la ciudad berciana. Para el próximo sábado día 31 de julio han convocado una nueva manifestación sobre las 12 de la mañana que comenzará en la Plaza de Lazurtegui de la ciudad de Ponferrada.
El Consejo Comarcal de El Bierzo pide al Gobierno que mantenga los parques eólicos
Los sindicatos de El Bierzo han denunciado que estos despidos no sólo afectan a casi 400 trabajadores y familias, sino a toda la comarca, que ya no se puede permitir perder más empresas, pues sufre una situación muy grave desde hace décadas. El Consejo Comarcal de El Bierzo ya se ha anticipado y ha aprobado la moción de Coalición por El Bierzo para pedir al Ministerio para la Transición Ecológica que elabore planes para mantener los parques eólicos.
Franco Dávila