Un reciente estudio realizado por la Universidad de Granada junto con el CIBER de Epidemiología y Salud Pública revela que existe una alta presencia de arsénico y mercurio en la leche materna. Los factores que son determinantes para este estudio han sido el tabaquismo y la alimentación materna. A pesar de esto, esta leche sigue siendo la opción más recomendable para los recién nacidos.
La investigación se ha desarrollado con muestras del banco de leche materna y se ha monitorizado constantemente después de encontrar en casi todas las muestras arsénico y más de un 80% de las muestras también presentaron mercurio.
La leche materna se sigue considerando la mejor opción para el recién nacido
En este estudio realizado por el CIBEREP y la Universidad de Granada ha sido publicado en la International Journal of Hygiene and Environmental Health y ha analizado la presencia de contaminantes ambientales en la leche materna. Se analizó la concentración de mercurio, plomo, cadmio y arsénico en 242 muestras de leche materna que fueron obtenidas entre los años de 2015 y 2018 de 83 donantes en el Banco de Leche del Hospital Universitario de Granada. Las donantes tenían una media de 33 años y casi la mitad tenían un hijo.
Los metales que estudiaron son contaminantes ambientales comunes a los que estamos expuestos toda la población.
Inés Alonso