«Soy Juan y estoy sordo, si no te leo los labios para mí es una tortura, me quedo totalmente aislado. Ayúdame a conseguir que se homologuen las mascarillas totalmente transparentes.»
Así pide ayuda un niño sordo a través de facebook, ya que es de urgente necesidad que se homologuen las mascarillas inclusivas transparentes, para que las personas sordas puedan comunicarse.
Y es que las personas sordas están sufriendo esta pandemia con mucha más intensidad que el resto, ya que para ellos es imprescindible y no un capricho, que la mascarilla no tape los labios.
Imagínate que los niños sordos en el colegio no pueden saber lo que le dicen sus compañeros o profesores, la impotencia y el desasosiego que tienen porque se sienten totalmente aislados.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística, hay algo más de un millón de personas con alguna discapacidad auditiva, y unas trece mil usuarias de la lengua de signos.
Estas personas tienen que ajustar el volumen de su implante coclear para poder oír, que no escuchar, a la persona que les habla. Además existe la dificultad del ruido ambiental, cuestión que lo entorpece aún más.