El problema de la superpoblación de jabalí, los daños a la agricultura y la presencia en exceso que esta especie tiene, se debe a múltiples factores como el abandono rural, los cultivos intensivos o el crecimiento de espacios naturales. Pero aun así, existe un común denominador en Europa que propicia el incremento desproporcionado del jabalí. La caza indiscriminada y sin rigor técnico.
Hasta el punto que Alemania ya posee una Ley Federal que prohíbe matar a determinados ejemplares de jabalí de los grupos familiares. En especial la hembra matriarca, su protección es total y quien mate uno de estos ejemplares de los que depende la estructura del grupo, es denunciado y sancionado “por causar daños a la agricultura”.