La disparatada subida del precio del café sigue en alza
Los altos precios de la luz están ahogando lentamente al sector de la hostelería, obligando a los propietarios a tomar ciertas medidas para sobrevivir, entre ellas la subida del precio del café. Cada día, la rutina de muchos trabajadores es ir a por un café calentito a la cafetería más cercana o la de toda la vida para realizar un pequeño descanso, acción que en nuestra ciudad de León viene acompañada de una tapa dulce o salada, según el antojo de la persona.
Si nos ponemos a echar cuentas, el dinero gastado en esta costumbre es de una media de 5 euros semanales, pero con los nuevos tiempos, los hosteleros han decidido aumentar considerablemente el precio del café. Aunque parezca que solo 20 céntimos no es gran diferencia, suponen microcambios que se notan a la larga, y es que no solo ha subido este importe, sino que la cifra es mucho mayor, situándose un mero café con leche normal, que no grande, por 1,20 o 1,30 euros.
Los clientes se despiden del típico 0,80€ por un café para toparse con este incremento, que para las carteras más justas, provoca que se reduzca el consumo de los mismos. Es tal el cambio que podemos encontrar esta bebida por 1,80€ o 2,30€ siendo ‘básica’, es decir, nada de cappuccino o con leche condensada, tan solo leche normal o sin ella, eso sí, un poco más grande.
A qué se debe la subida del precio del café
Es en estos momentos en los que muchas personas se preguntan si es necesaria tal subida o solo se buscan más ganancias. La respuesta de los propietarios de las cafeterías explican que si no aumentan los precios del café, las facturas, sobre todo de la luz, van a acabar con ellos.
Si bien, lamentan que tengan que pagarlo los clientes, no ven otra manera de subsistir. Por ello, incluso si actualmente el coste de esta bebida parece estar estancado, se prevé que en unos meses vuelva a elevarse.
La situación es tan insostenible que ayer realizaron apagones en locales de todo el país para manifestar su preocupación por el sector y no se descarta que siga habiendo protestas hasta encontrar una solución.