Durante la tarde noche de ayer más de 12 jóvenes fueron sancionados en la ciudad de León, ya que, una vez más, los botellones han vuelto a inundar la capital leonesa.
Botellones, fiesta, desenfreno y coronavirus
Desde que la pasada semana finalizará el estado de alarma, toda la ciudad de León, se echó a temblar. Unos por emoción y otros por miedo a esa emoción de algunos jóvenes. Ya que, el fin de semana pasado ya pudimos ver como los botellones fueron los grandes protagonistas de la jornada.
Este fin de semana parece que se presenta de la misma forma. Ya que los botellones, la fiesta, el desenfreno y con ello el coronavirus, están más presente que nunca.
Más de 12 jóvenes sancionados ayer en León
Más de 12 jóvenes fueron sancionados durante el día de ayer por la Policía Local del Ayuntamiento de León. Sin embargo, cabe destacar que estas no son las únicas sanciones que los agentes interpusieron ayer en nuestra ciudad.
A las 20:15 horas de la tarde comenzaron las multas por realizar botellones en León. Tres menores de edad estaban realizando un botellón en la zona de Cantamilanos. Cuando llegaron los agentes al lugar de los hechos, uno de estos intentó huir, sin éxito.
Tan solo 10 minutos más tarde, en la zona de la carretera de Carbajal, los agentes tramitaron otras 4 denuncias por consumo de alcohol en la vía pública. Estos menores de edad, estaban celebrando el cumpleaños de uno de ellos. A todos los padres de los menores de edad se les puso en conocimiento de estos hechos.
Del mismo modo, en la avenida Príncipe de Asturias, sobre las 23:30 horas de la noche, otros cuatro jóvenes fueron multados. Dos de ellos por realizar botellón en la vía pública y los otros dos por no usar la mascarilla obligatoria y no respetar la distancia de seguridad entre ellos.
Por último en el día de ayer, a las 02:30 horas, en el Paseo de la Condesa, en la zona del río Bernesga, un grupo de cuatro jóvenes estaban realizando un botellón. Esta actuación policial de saldó con un total de 4 denuncias por beber en la vía pública, y además una más por faltar el respeto a los agentes.
Amanda Arroyo