Un vecino de San Andrés del Rabanedo ha denunciado la presencia de comida con clavos en zonas para pasear a los perros. Esta práctica es cada vez más común en todas las zonas de León, esta vez han encontrado salchichas con clavos en la pradera del aparcamiento del Colegio La Anunciata.
Incluso, la semana pasada, un vecino de la zona de la Palomera fue visto echando grandes cantidades de veneno para matar a los perros.
El dueño del perro ha querido dar la voz de alarma a través de las redes sociales.
Salchichas con clavos en San Andrés del Rabanedo
«Voy a pedirlo por favor para ser más educado que el personaje que se dedica a hacer esto. Hoy le sacamos esto a un perro de la boca en la pradera del aparcamiento de las dominicas. Si tenéis o tienes algo en contra de que vayamos con nuestros perros o de nosotros creo que las cosas se pueden hablar con educación y no pagándolo con los animales…eso sólo demuestra lo mala persona y lo cobarde que es el desgraciado que lo hace».
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¿Dónde está el límite del maltrato animal?
Por suerte, pudieron evitar que su perro que olisqueó el siniestro regalo lo comiera.
La LO 15/2003 de 25 de noviembre introdujo por primera vez, como delito, el maltrato animal en el Código Penal español. Así, en caso de causar lesiones a un animal se prevén penas que van desde los tres meses y un día a un año de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio de profesión u oficio que tenga relación con los animales y para la tenencia de los mismos. En caso de provocar la muerte del animal, la pena podría ascender a los 18 meses de privación de libertad.