Se ha detectado un nuevo caso de acoso escolar el cual ha sido registrado en un conocido colegio de León, el cual ya tiene antecedentes, de otros niños que han pasado por lo mismo.
El Procurador de lo Común, tras conocer el nuevo caso de acoso escolar, en la ciudad de León, asegura la falta transparencia. Ya que la menor de edad, ha vivido durante todo un año en el colegio de los Maristas San José recibiendo acoso escolar. El cual además venía acompañado, por si fuera poco, con coacciones y con aislamiento social.
Agresiones físicas y vejaciones
Estos sucesos tan despreciables, llegan después de que se cumplieran tres años, desde que un pequeño, que estudiaba en el mismo centro sufriera acoso escolar. Durante cinco años el estudiante tuvo que aguantar agresiones físicas y vejaciones hacia su persona, tanto de compañeros como de los padres de ellos.
Cabe señalar que tanto el caso anteriormente mencionado, como el nuevo que se ha registrado, han tenido lugar en el Colegio Maristas San José, que está ubicado en la ciudad de León.
La menor ha vivido un calvario durante un año
La madre de la pequeña que ha sufrido acoso escolar en dicho colegio de León, asegura que este año ha sido «un calvario». Esta señala directamente a la dirección del colegio de la capital leonesa, ya que no es el primer caso de acoso escolar que se registra en él. Pero también culpa a la Dirección Provincial de Educación, así como a la Junta de Castilla y León.
Las administraciones púbicas aseguran que todo está arreglado
No obstante, las administraciones públicas a las que la madre ha señalado, aseguran que el caso se ha resuelto satisfactoriamente. Ya que el procedimiento que ha seguido el colegio leonés cumple con la normativa existente de prevención de acoso escolar. Y que, del mismo modo, el proceso ha sido supervisado por la inspección educativa.
Del mismo modo, el centro donde se ha producido el acoso escolar en la ciudad de León también se ha pronunciado. Y han asegurado que han actuado rápidamente, en el momento que se enteraron de las agresiones. Y que, al menos por su parte, es una situación que se ha solucionado.
Amanda Arroyo