Un estudio forense ha desvelado la verdadera cara de San Isidro Labrador. El Santo es el patrón de Madrid y sin lugar a dudas uno de sus símbolos de la capital de España. Las investigaciones llevadas a cabo han determinado el verdadero aspecto del patrón madrileño y ha desvelado algunos datos curiosos.
Los datos forenses y antropológicos realizados no dejan dudas. En el momento de su fallecimiento, San Isidro Labrador contaba entre 35 y 45 años. Medía entre 1,67 y 1,86 metros y tendría rasgos afrodescendientes. Quiere decir que su origen étnico provendría de África aunque tendría rasgos de otros troncos ancestrales como el caucásico o el asiático. Unas conclusiones que han dinamitado la tradicional imagen del Santo al que habitualmente se le ha representado con piel clara y cabellos castaños incluso rojizos.
San Isidro Labrador podría haber muerto por una infección en la boca
Según la investigación, el Santo habría fallecido alrededor del año 1130. No se han hallado signos de violencia en el cuerpo pero sí hay signos de infección dental que podrían haber desencadenado en el fallecimiento del Santo. También se ha constatado que existen algunos signos degenerativos en algunas partes del cuerpo compatibles con la actividad como labrador.
Como dato curioso cabe destacar que tenía una moneda en la garganta. Posiblemente sea uno de los descubrimientos más llamativos.