La Guardia Civil investiga a Fernando Simón. Ya se ha iniciado la investigación para buscar responsables penales por permitir la polémica marcha del 8-M. La autorización de esta manifestación está siendo uno de los principales caballos de batalla de la oposición y los medios de comunicación más críticos con la gestión del gobierno de esta crisis. Pero ahora da un paso más allá y ha llegado hasta los tribunales, que apuntan a varios posibles responsables.
Las pesquisas, dirigidas por el Juzgado de Instrucción número 51 de plaza de Castilla apuntan hacia el delegado del Gobierno en Madrid quién podría estar implicado en un supuesto delito de prevaricación por hacer permitido los actos públicos y aglomeraciones cuando, según la acusación, ya se tenía la información suficiente del riesgo que suponían.
La Guardia Civil investiga a Fernando Simón por el 8-M
Las diligencias de la Guardia Civil también han acreditado que el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad tenía al menos tres días antes de la manifestación del Día de la Mujer datos que evidenciaban la gravedad de la crisis.
Recordemos que también un acto político de Vox en el Palacio de Vistalegre congregó a 9.000 cargos y afiliados. Así como un partido del Atlético de Madrid reunió en el Wanda Metropolitano a 60.000 espectadores.
El principal problema de Fernando Simón es que tuvo un papel decisivo en la suspensión de un congreso evangélico. Este iba a celebrarse en Madrid entre el 19 y 21 de marzo. Lo cual, según la investigación, podría indicar que ya se era consciente del riesgo que podría suponer reunir a muchas personas.