Varias instituciones, como puede ser entre ellas Cáritas, ha decidido actuar y por ello presentará una denuncia ante la Fiscalía. El motivo no es otro que la situación de los inmigrantes que han sido amenazados y estafados en Alemania.
En concreto se trata de un grupo de inmigrantes que viven en viviendas ubicadas en Wuppertal. De donde según dicen, los propietarios quieren desalojarlos.
De hecho esto no es nuevo, los problemas empezaron hace algunos meses, cuando el precio establecido por habitación era de 300 euros. Sin embargo en plena pandemia y en plena crisis el precio actual es de 500 euros.
Por esta razón dejaron de pagar asegurando que jamás les habían dado ni un solo recibo. Además también denuncian que no hay ni siquiera limpieza ni mantenimiento. Teniendo incluso que vivir con el techo del baño literalmente caído tras desplomarse sobre el habitante.
Pero la historia no acaba aquí, de hecho es solo es principio. Ya que llegaron a estar sin agua hasta un total de nada más y nada menos que 10 días. Tras la intervención de Cáritas para solucionarlo, los inquilinos han hablado.
Según ellos, aseguran recibir amenazas constantes, e incluso personas allegadas a los propietarios merodean por la zona para obligar a desalojarlos sin ningún tipo de orden judicial.
Jose Mateos Mariscal