Suri, la hija que tienen en común Katie Holmes y Tom Cruise, a medida que va pasando el tiempo se parece más a su madre, a la vez que da la sensación de que está más unida a ella, a diferencia de lo que sucede con su padre.
Hace doce años la actriz anunció la separación de Tom Cruise, una noticia que sorprendió a todo el mundo. Tras tomar la decisión, Katie Holmes se mudó con su hija de Hollywood a Nueva York, donde dedicó más tiempo a su carrera de diseñadora y alejó a Suri de la Cienciología. Este fue el auténtico motivo por el que se separó del actor.
Tanto es así que Holmes matriculó a su hija en un colegio católico. Meses después de su separación, las fotografías en las que aparecían padre e hija fueron disminuyendo. La última es de julio de 2012.
Ahora el diario ‘US Weekly’ asegura que Tom Cruise lleva años sin verla y eso que tiene derecho a estar con ella 10 días al mes, pero no lo hace, según señala una fuente anónima.
«Él ha decidido no verla porque no pertenece la Cienciología», explica.