Hace unos días os informábamos de la muerte de Jordi Rebellón, conocido por su papel del doctor Vilches en la famosa serie de Hospital Central, a causa de un ictus. Cuando alguien padece este grave problema de salud, cada minuto cuenta y es importante identificar las señales que lo confirmen.
El ictus, segunda causa de muerte en España
En España cada año alrededor de 120.000 personas sufren ictus, una enfermedad cerebrovascular que ocurre de forma repentina y sin avisar. Se trata de la segunda causa de muerte en nuestro país, la primera en el caso de las mujeres. En la mitad de los casos provoca una discapacidad grave o la muerte. Por Comunidades Autónomas, Andalucía encabeza la lista, seguida de Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana y Galicia. Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), esta enfermedad afectará a 1 de cada 6 personas.
El ictus se produce cuando un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro se tapona por un coágulo o se rompe. Como consecuencia, una parte del cerebro no recibe el flujo de sangre necesario y las células nerviosas tampoco reciben oxígeno. Entonces dejan de funcionar y mueren al cabo de unos minutos. Por lo tanto, es vital actuar con rapidez si creemos que alguien está sufriendo un ictus. Así evitaremos que sufra alguna incapacidad o incluso la muerte.
Síntomas para identificar que alguien está padeciendo un ictus
Por lo general, los síntomas del ictus se producen de forma inesperada y brusca. Los más frecuentes son la pérdida de fuerza o sensibilidad en una parte del cuerpo, dificultades para hablar, la alteración de la simetría facial, sensación de hormigueo en la cara, brazo o pierna, problemas de visión, dolor de cabeza muy intenso, desequilibrio o vértigo. En la mayoría de los casos, los pacientes que sufren un ictus manifiestan varios de estos síntomas. No obstante, con solo experimentar uno de ellos ya debemos llamar inmediatamente al 112.
Respecto a los factores de riesgo se encuentran la diabetes, niveles de colesterol altos, hipertensión arterial, obesidad, problemas de corazón, tabaquismo, vida sedentaria o consumo de alcohol. Los años también influyen, pues la incidencia aumenta a partir de 60-65 años. No obstante, puede aparecer a cualquier edad; en los últimos años ha aumentado la incidencia de ictus en adultos jóvenes debido a los estilos de vida estresantes en las ciudades.
Para terminar, cabe destacar que cada minuto cuenta. Si hemos identificado los síntomas debemos acudir cuanto antes al hospital, donde pronosticarán la enfermedad. Se trata de una clave para salvar a la persona que padezca un ictus. También es importante llevar un estilo de vida saludable que incluya una dieta sana, no beber alcohol, no fumar, evitar el sobrepeso o hacer ejercicio físico.
Eloy Martínez