La estrella del porno español Nacho Vidal, ha sido detenido, junto con su prima y un amigo, tras protagonizar un peligroso ritual de chamanismo en su casa de Enguera, en Valencia, durante el que acabó falleciendo el conocido fotógrafo de moda José Luis Abad.
El ritual en cuestión acabó provocando que el fotógrafo entrara en parada cardiorespiratoria. Este consiste en fumar las escamas del veneno de un sapo para entrar en trance. Al parecer, había recurrido a esta sustancia para superar su adicción a las drogas, pero ¿qué es el veneno de sapo?
¿Qué es la ‘molécula de dios’?
Quienes la consumen lo hacen inspirándola. Entonces comienzan de forma instantánea los gritos, los ojos en blanco o las alucionaciones.
El DMT es considerado uno de los alucinógenos más potentes del mundo. También conocido como ‘molécula de dios’, o ‘escamas de sapo’ procede de las glándulas del Bufo Alvarius, una rana centroamericana.
El proceso para conseguir la droga, es sencillo: se consigue apretando una glándula del animal y extrayendo su secreción; posteriormente el líquido se seca y genera unas escamas que son las que se fuman.
El DMT llegó a nuestro país en el 2017. Desde entonces se ha movido por todo el territorio, principalmente por Madrid, Marbella y Barcelona dado el vacío legal que lo permite.
La forma de consumir este alucinógeno es en sesiones grupales de 24 horas que obscilan en un coste de entre 150 y 200 euros. Se suele vender como ‘turismo chamánico’, pero cada persona acude a las escamas de sapo por una razón diferente: desde depresiones hasta adicciones a otras drogas.
De hecho, hasta el propio Nacho Vidal confesó en un vídeo haberla probado e incluso llegó a recomendar a todo el mundo hacerlo al menos «una vez en la vida».
Sin embargo, la ‘molécula de dios’, como cualquier otra droga, también es muy peligrosa y la reacción que causa suele ser muy diferente en cada persona: desde risa hasta fuertes alucionaciones o brotes psicóticos.