Un paseo por León, La Catedral (Tercera parte) es la continuación de nuestros anteriores artículos sobre la Catedral y la continuación del paseo de nuestro viajero.
Fachada occidental de la Catedral
La portada central de esta fachada es la denominada de la Virgen Blanca, o también, del Juicio Final, por ser estos los dos temas centrales de la misma.
La puerta principal se abre en dos vanos cortados por un parteluz en el que se halla la figura de la Virgen Blanca. Esta obra es moderna copia al punto de Andrés Seoane, conservándose la original en la capilla central de la girola. Esta escultura e una de las producciones más sobresalientes del gótico universal; ella por sí misma dio nombre a su autor, conocido como Maestro de la Virgen Blanca.
Sobre la puerta corre un dintel decorado con motivos florales; y sobre este un friso de tipo cristalino describe la escena del Juicio Final: San Miguel, en el centro, pesa las almas y es línea divisoria entre los personajes gloriosos y el mundo infernal.
Completa el tímpano la figura sedente de Cristo juez acompañada por dos ángeles que portan los atributos de la Pasión y las figuras impetrantes de la Virgen y San Juan. Las arquivoltas se cuajan de diversa índole, bajo doseletes.
La Virgen Blanca es la pieza central de la Catedral
La Virgen Blanca está acompañada por los apóstoles, que se distribuyen categóricamente en las jambas. No es un error, como apuntan algunos autores, la sustitución de la Virgen por el Cristo maestro. Dicha sustitución es consecuencia de la influencia de la obra de San Buenaventura, cuya doctrina mariana entró en los artistas medievales y fueron estos mismos quienes, deliberadamente, operaron tal sustitución.
La puerta izquierda, denominada San Juan, presenta un tímpano dividido en tres bandas con escenas alusivas a la vida de la Virgen en relación con su hijo. Así, la Visitación, la Natividad de Cristo y de la Virgen, el sueño de José, el anuncio a los pastores, la adoración de los Reyes, conversación de Herodes con los Reyes, huida a Egipto y matanza de los inocentes.
Las arquivoltas se decoran con diversos personajes, destacándose entre ellos los reyes bíblicos. En las jambas, las esculturas de San Pedro revestido de pontificial, San Juan, David, Salomón y la escultura de Justicia, obra ya del siglo XVI, coronada y portando balanza y espada, en la cual, con caracteres góticos se define el término justicia, cuya traducción del latín es la siguiente:
Justicia es dar a cada uno lo suyo
Las puertas de nogal son obra muy fina de finales del siglo XV o principios del XVI. Entre las dos portadas descritas se yergue el locus apellationis. Este era el lugar donde se reunía el órgano jurídico supremo de la ciudad para dictaminar las causas.
Está presidido por una figura representando a un rey a modo de impartir justicia. La puerta de la derecha se denomina de San Francisco, Su tímpano se divide en tres franjas. La baja representa la Dormición de María, la central el momento de expectación ante su coronación acompañada del Padre Eterno y dos ángeles sosteniendo la corona de la Virgen.
En las arquivoltas se representan ángeles, arcángeles y el tema bíblico de las Vírgenes prudentes y necias. En las jambas se distribuyen los personajes de Isaías, San Juan, reina de Saba, Simeón, la sibila Eritrea y el Salvador.
Los pilares de entre las puertas se decoran con personajes bíblicos y santos.