En el corazón de nuestra querida provincia de León, encontramos el maravilloso pueblo de Castrillo de los Polvazares y su delicioso cocido maragato, la localidad pertenece a la zona de la Maragatería, y es uno de los pueblos más bonitos de España.
Castrillo de los Polvazares y sus encantos
La provincia de León demuestra que un lugar no tiene que tener excesivas cosas para ser un lugar de ensueño, esto pasa con Castrillo de los Polvazares, una localidad en la que no encontraremos grandes monumentos que visitar porque todo él es un monumento. Sus tranquilas y preciosas calles empedradas y sus tradicionales casas son una maravilla para la vista y acudir a él al menos una vez en la vida, es de obligado cumplimiento. Pero su belleza no es lo único que llama la atención de este precioso pueblo, ya que aquí encontramos los cocidos maragatos más conocidos de la provincia.
El famoso cocido maragato
Estaremos todos de acuerdo en que la gastronomía de León es sin lugar a dudas una de las mejores de toda España, por no decir la mejor, gracias a su gran variedad y su delicioso sabor. Uno de los platos estrella es el cocido, pero no el cocido normal, en Castrillo de los Polvazares encontramos el delicioso cocido maragato, que además de estar delicioso, llama la atención el orden en el que se come, y el por qué se come así.
Cuando hablamos de cocido nos imaginamos una deliciosa sopa, garbanzos con berza, y por último la carne. Sin embargo el cocido maragato se sirve al revés, cuando vamos a comer un delicioso cocido maragato nos van a servir lo primero la carne, luego los garbanzos con berza y la sopa, pero no acaba aquí, ya que es habitual que nuestro postre para cerrar la deliciosa comida sea unas natillas caseras, pero… ¿Por qué se come así?
Existen varias teorías sobre de dónde viene la forma de comer el cocido maragato, algunas tan básicas como que era la comida típica de labradores y necesitaban reponer fuerzas y la carne se quedaba fría y decidieron comerla al principio. Otras que nos tenemos que ir muchos muchos años atrás, a la invasión napoleónica, se dice que los habitantes de Astorga hostigaban continuamente a los franceses y estos decidieron reducir el tiempo de la comida y comer lo que más energía les daba primero.
Amanda Arroyo