La ruptura de Aitana con Miguel Bernardeau sorprende tras cuatro años de amor
Aitana y Miguel Bernardeau han decidido separar sus caminos cuatro años después de que comenzaran una relación que para muchos era idílica. Pero el amor no todo lo puede y así lo han demostrado tanto la cantante como el actor, que llevaban varios meses mostrándose tensos frente a las cámaras y en las entrevistas se veía como ‘saltaban chispas’ entre ellos.
El rodaje de ‘La última’, serie donde Aitana Ocaña hizo su debut como actriz, parece haber sido el punto de inflexión para ambos en su relación. La tensión entre ambos aumentó en el momento que comenzó el rodaje y Miguel Bernardeau se vio obligado a ‘dejar de lado’ proyectos profesionales más interesantes de cara a su carrera profesional por grabar una serie con la que, hasta ese momento, era su pareja.
La ruptura de Aitana y Miguel Bernardeau no ha dejado indiferente a nadie y es que, ambos se encontraban de ‘premier‘ hasta hace menos de una semana e iban pasando de programa en programa para mostrar su nuevo proyecto juntos. La realidad es que ‘no es oro todo lo que reluce’ y todas las actitudes extrañas y distantes que mostraba Miguel Bernardeau en cada una de esas entrevistas era el claro ejemplo de que su relación con Aitana estaba ‘en las últimas’.
Aitana sigue en la casa donde vivía con Miguel pero él ha vuelto a casa de Ana Duato
La ruptura de Aitana y Miguel Bernardeau ha obligado a que uno de los dos abandone la vivienda donde ambos vivían hasta hace unos días. Después de que la relación estuviera ‘bastante tensa’ desde el mes de mayo, según ha podido confirmar Lecturas, ha sido la cantante catalana la que se ha quedado la casa en común. En cambio Miguel Bernardeau ha vuelto a casa de sus padres donde se reencontrará con su madre Ana Duato.
Se ha podido ver a Miguel Bernardeau bastante afectado recogiendo sus enseres y las pocas cajas que quedaban dentro de la casa que tenía en común con Aitana Ocaña. Siendo evidente que la idílica historia de amor entre Aitana y Miguel ha llegado a su fin después de cuatro largos años.