La verdad del atleta Mohamed Farah, el gran atleta británico: llegó de manera ilegal y fue un esclavo doméstico
En un documental en la BBC, este deportista, leyenda olímpica, cuenta que no se llama Mohamed Farah y que fue llevado a Inglaterra engañado
El atleta británico Mohamed Farah, una de las grandes figuras británicas, fue llevado de niño al Reino Unido de manera ilegal y tratado como esclavo doméstico, según él mismo ha relevado en un documental de la BBC.
En el programa, titulado «El verdadero Mo Farah», que emitirá este miércoles la emisora británica, el atleta señala que había dicho que nació en Somalia y que había entrado como refugiado en el Reino Unido desde Mogadiscio cuando tenía 9 años para unirse a su padre que trabaja en Londres, algo que no era verdad.
Según la estrella olímpica, fue víctima de tráfico ilegal cuando fue llevado a Londres desde Djibouti en los años noventa del siglo pasado y que su verdadero nombre es Hussein Abdi Kahin.«Durante años mantuve esto oculto», afirma el atleta, que añade que sus padres nunca viajaron al Reino Unido y que su madre y sus dos hermanos viven en una granja en Somalilandia, que declaró la independencia en 1991 pero no está reconocida internacionalmente.
Su padre, Abdi, murió por unos disparos cuando Farah tenía 4 años de edad durante la violencia civil en Somalia.
Según explicó, después fue a vivir con familiares en Djibouti y después llevado al Reino Unido por una mujer que él nunca había visto y que no era familiar suyo. Ella le dijo que lo llevaba a Europa a vivir con familiares, algo que le animó porque nunca había viajado en avión.
Sin embargo, al llegar a Londres esta mujer lo llevó a su piso del barrio de Hounslow, en el oeste de la capital británica, y le dijo que empezaría a llamarse Mohamed. A partir de entonces fue obligado a realizar tareas domésticas y cuidar niños de otra familia, mientras que no se le permitió ir a la escuela hasta los 12 años de edad.
La verdadera historia es que nací en Somalilandia, al norte de Somalia, como Hussein Abdi Kahin. Mis padres nunca vivieron en el Reino Unido
Fue en la escuela donde mostró su talento para el atletismo, algo que, según él, le cambió la vida ya que pudo participar en eventos competitivos en escuelas británicas. Su maestro de deportes, Alan Watkinson, le ayudó a obtener la ciudadanía británica con el nombre de Mohamed Farah, que las autoridades le concedieron en julio del año 2000.
El atleta dice ahora en este documental que quería contar su historia para llamar la atención sobre la esclavitud y el tráfico de personas.