El Frente Polisario suspende las relaciones y contactos con el Gobierno de Pedro Sánchez
El Frente Polisario anunció este sábado la ruptura de contactos con el Gobierno de Pedro Sánchez. Esta noticia llega en un momento marcado por la decisión del presidente del Gobierno de respaldar la solución al conflicto del Sáhara Occidental que defiende Marruecos y que consiste en otorgar una autonomía limitada al territorio, descartando cualquier referéndum de autodeterminación.
El Frente Polisario, también conocido simplemente como Polisario, es el movimiento de liberación nacional del Sahara Occidental, que trabaja para acabar con la ocupación de Marruecos y conseguir la autodeterminación del pueblo saharaui.
El comunicado, de esta madrugada y fechado en Bir Lehlu (Sáhara Occidental), indica que la decisión se toma tras el apoyo a la «ilegal propuesta del ocupante marroquí que pretende legitimar la anexión de los territorios del Sáhara Occidental por la fuerza e ignorando los derechos inalienables del pueblo saharaui a la autodeterminación e independencia».
El comunicado explica que la decisión se ha tomado “a la vista de los pasos concretos que ha dado el Gobierno de Pedro Sánchez en este sentido […] para desmarcarse de utilizar la cuestión saharaui en el marco de míseros tratos con el ocupante [en alusión a las negociaciones entre Madrid y Rabat sobre la normalización de sus relaciones] y hasta que “se adhiera a las resoluciones de legitimidad internacional que reconocen el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y a respetar las fronteras de su país como son reconocidas internacionalmente”.
El Polisario ha asegurado en el escrito que España «tiene responsabilidades» hacia el pueblo saharaui y ante Naciones Unidas, ya que «es potencia administradora» de la región, «cuyas responsabilidades no prescriben».Asimismo, han agradecido al Congreso de los Diputados de España y al «amplio y transversal movimiento de solidaridad» con su causa, por instar «tan rotundamente» al Gobierno español en la «necesidad de retornar a la senda de la legalidad internacional».
