El nuevo y sorprendente apoyo de Ana Julia Quezada, autora confesa de la muerte del niño Gabriel Cruz, en el interior de la prisión es una presa de confianza que pasa las 24h del día con ella como parte del protocolo anti suicidios, y al parecer «se llevan estupendamente».
De esta forma el centro penitenciario confirma que está garantizada al «100% la seguridad de Ana Julia» ya que incluso varios funcionarios la protegen cada vez que sale de su celda.
«En cualquier prisión de España tendría los mismos problemas», ha confesado su propio abogado Esteban Hernández Thiel, ya que cree que tendría el mismo problema en cualquier centro debido a la gran repercusión mediática de su crimen.
El periodista Jorge Luque ha desvelado en el HuffPost, «Cuando llegó traía un fajo enorme de billetes pero no pudo meterlo porque disponen de 100 euros cada semana y sólo quiere que su celda esté llena de café y tabaco».
Según ha informado el Programa de Ana Rosa, la nueva sombra de Ana Julia es una argentina de 45 años que asesinó a su marido.