Las autoridades francesas están analizando dos cajas de ETA halladas en Bayona que contienen 24 armas cortas, 500 detonadores electrónicos, 200 placas de matrículas y diverso material para el robo de vehículos, además de munición de 9 milímetros y 38 SP, cordón detonante de 20 metros y dos temporizadores, según confirman a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista.
El arsenal de ETA ha sido facilitado a la Policía Judicial de Bayona y a la Fiscalía y ha sido intervenido un año después de la escenificación del desarme de ETA en esta misma ciudad francesa y a falta de nueve días de la anunciada disolución en Kanbo, el municipio galo elegido por diferentes organizaciones para escenificar el próximo 4 de mayo el acto de disolución de la banda terrorista, que ha dejado en sus 60 años de historia más de 800 asesinados.
Las citadas fuentes han explicado que las autoridades galas, en colaboración con las españolas, están comprobando si el material incautado ahora está relacionado con el inventario de armas que aparecieron en un primer momento en el listado de zulos que ETA facilitó a los ‘mediadores’ en Bayona hace ahora poco más de un año, el 8 de abril de 2017.
El acto de Kanbo será la ‘pista de aterrizaje’ para que ETA proceda a su final, siguiendo la misma estrategia de intentar captar la atención internacional que ya ensayó con la Declaración de Aiete celebrada tres días antes de que el 20 de octubre de 2011 la banda declarara el cese de los atentados. Se desconoce, por ejemplo, en qué términos concretos se referirá a su final, si hablará de disolución o buscará alternativas como desmovilización.
Han transcurrido, por tanto, más de seis años desde que ETA claudicara asfixiada por los sucesivos golpes policiales y desistiera de forma definitiva de la violencia y más de uno desde que escenificara su desarme en un acto celebrado en Bayona el 8 de abril de 2017. Ese día aseguró que había entregado en ocho depósitos enterrados 120 armas y tres toneladas de explosivos, aunque luego las autoridades galas rebajaron esta cifra.
Armas y zulos
Las fuerzas de seguridad desconfiaron del supuesto desarme de ETA en Bayona al saber de su incapacidad actual para conocer exactamente cuál es el arsenal que mantiene escondido. También por miedo a que los zulos de la banda terrorista sigan controlados por la policía, por lo que la manipulación de las armas podría conllevar detenciones. Por este motivo se optó por dar las coordenadas de los escondites.
En este tiempo ha habido hallazgos fortuitos como el zulo descubierto en enero por un vecino que paseaba en un bosque de Las Landas, cerca de Bayona. Las autoridades francesas abrieron una investigación para analizar la documentación en soporte electrónico hallada en este escondite con una antigüedad de al menos diez años y que sirvió para ocultar, además, una bomba lapa, una veintena de cartuchos, ocho detonadores y tres temporizadores.