Durante la noche del sábado, París sufrió otro atentado terrorista, donde varias personas resultaron heridas.
Las primeras informaciones recibidas “sobre la base de los testimonios que afirman que el hombre gritó Allahu Akbar (Alá es grande) y en vista del modus operandi, hemos encargado (la investigación) a la sección antiterrorista de la fiscalía de París”, explicó Molins desde el lugar del ataque, en el distrito dos de la capital francesa, en la zona de Ópera, un área muy concurrida porque hay varios teatros y numerosos bares y restaurantes.
Los datos que se conocen es que el terrorista es un refugiado checheno de 20 años, nacionalizado francés en el 2010 al mismo tiempo que su madre y fichado por los servicios antiterroristas desde el 2016, es el autor del ataque yihadista que causó un muerto y cuatro heridos el sábado en París antes de ser abatido por la policía.
El Estado Islámico (EI), que se ha responsabilizado del atentado, difundió ayer un vídeo en el que el supuesto agresor, con el rostro oculto, llama a los musulmanes residentes en Europa a multiplicar los ataques en «tierra de infieles». «Me dirijo a Francia y a sus ciudadanos: sois vosotros quienes habéis comenzado a matar a los musulmanes. Si queréis que esto pare, haced presión sobre vuestro Gobierno», arenga tras jurar lealtad al califato.
Khamzat Azimov, identidad difundida por los medios franceses, nació en noviembre de 1997 en Argún, Chechenia. Llegó a Francia con sus padres a comienzos de los años dos mil, época de la segunda guerra chechena tras la registrada en los noventa. Creció en Niza y luego en Estrasburgo, en el barrio popular de Elsau, en el que vive una importante comunidad chechena.
Cuando tenía 19 años, Khamzat apareció en los radares de los servicios antiterroristas franceses debido a sus vínculos con un grupo de jóvenes deseosos de partir a Siria para practicar la guerra santa.