Agentes de la Policía Nacional han procedido en León a la detención de una mujer, de nacionalidad española y 51 años de edad, como presunta autora de un delito continuado contra la salud pública por tráfico de estupefacientes, siendo intervenidas, en el registro efectuado en el domicilio de la detenida, ocho papelinas de “heroína”, preparadas para su venta, 2465 euros en efectivo, y utillaje para pesaje y distribución de la droga.
Por el Grupo de Estupefacientes de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Comisaría de León se desarrollan investigaciones tendentes a la detección y desmantelamiento de los diferentes puntos de venta, almacenaje y ocultación de sustancias estupefacientes, y a la identificación y detención de sus autores. En el marco de dichas investigaciones se desarrollaron gestiones que dieron como resultado la identificación de la mujer ahora detenida, toda vez que se confirmó la venta de dicha sustancia estupefaciente desde el domicilio de la investigada.
La presunta autora fue detenida en el momento en que se disponía a realizar la venta de una papelina a uno de sus clientes. Tras la detención se realizó el registro en el domicilio, previa oportuna autorización judicial, siendo intervenido el resto de la droga preparada para su venta, el dinero y efectos que se encontraban repartidos por distintas estancias de la vivienda.
La detenida, que cuenta con antecedentes por tráfico de drogas, una vez finalizada la tramitación del atestado fue puesta a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de esta capital.
Por otra parte, el pasado día 12, una dotación de la Unidad de Prevención y Reacción de esta Comisaría de León y dentro del mismo dispositivo para erradicar el tráfico y consumo de sustancias estupefacientes, logró la detención de un varón español de 35 años de edad, a quien le fueron intervenidas catorce papelinas de heroína.
La detención se realizó en el filtro de un control de personas y vehículos establecido en la zona norte de la ciudad, tras observar los policías que el varón se guardaba en sus partes íntimas un paquete de tabaco y, al ser requerido sobre el mismo, espontáneamente reconoció que llevaba «un montón de papelinas de heroína».
Fue trasladado seguidamente a dependencias policiales para el total esclarecimiento de los hechos y su puesta a disposición judicial.
El consumo de “heroína” causa un grave daño a la salud, creando una dependencia tanto física como psíquica que obliga a los consumidores a delinquir para hacer frente a los costes que supone dicha adicción, lo que crea una doble alarma social.