Una madre británica, Joanne Logan ha interpuesto una denuncia contra el colegio donde estudia su hijo Charlie, que padece autismo, por obligarle a llevar un chaleco reflectante durante el recreo.
La madre, que tiene otros cuatro hijos con el mismo trastorno, asegura que el centro de estudios, situado al oeste de Londres, no le informó en ningún momento de esa práctica. «Cuando me enteré me sentí totalmente horrorizada», señala Logan en el texto que acompaña a una iniciativa de microfinanciacion en línea que ha iniciado para hacer frente a los gastos del litigio. Los costos ascienden a 10.000 libras (11.577 euros), de las cuales ha recabado por el momento menos del 10%.
El propio niño, de siete años, explica en un vídeo que se ha hecho viral en las redes sociales que cuando salía al patio del colegio le ponían esa prenda para diferenciarlo del resto de sus compañeros.
Joanne tacha la actuación del centro de «horrenda» y «discriminatoria» y confía en que, gracias a la interposición de la demanda, «no le pase a ningún otro niño». «¿Imaginas algo más desorientador, desconcertante e insensible con las necesidades de un niño pequeño y con autismo?», se pregunta la progenitora.
«Charlie está en un momento crítico de su vida en el que está desarrollando sus relaciones y aprendiendo dónde está su lugar en el mundo y le dan un chaleco para que destaque, de forma que sea más fácil para los maestros identificarlo», lamenta la madre.
El colegio por su parte se defendió con un comunicado, que reproduce el diario The Daily Mail, en el que afirma que la decisión de que llevara esa prenda se tomó en conveniencia con la madre para «poder identificar más rápido al pequeño en el caso de producirse una emergencia médica».