Cinco religiosos redentoristas fallecieron en el convento que la congregación religiosa tiene en Astorga en un intervalo de cinco días. Los fallecidos, todo ellos de más de 80 años de edad, murieron entre el día 5 y el día 9 de abril con síntomas de coronavirus, aunque, como dice el superior, “no les hicieron las pruebas”.
Se trata de los siguientes religiosos:
- D. ARSENIO GONZÁLEZ ARLARZÓN
Día 5 de abril de 2020, a los 84 años de edad. - D. GREGORIO MIGUEL ORTEGA
Día 5 de abril de 2020, a los 80 años de edad. - D. ANTONIO DANOZ FERNÁNDEZ.
Día 8 de abril de 2020, a los 90 años de edad. - D. PABLO VEGA CABERO.
Día 9 de abril de 2020, a los 83 años de edad. - D. ADELINO GARCÍA PAZ
Día 9 de abril de 2020, a los 89 años de edad
Según cuenta el superior de la congregación, todos los frailes fueron inhumados en el cementerio municipal de Astorga y su funeral se celebrará, “cuando las circunstancias sanitarias lo permitan”. El religioso da las gracias “por todas las muestras de solidaridad y condolencia recibidas”.
Entre los fallecidos se encuentra el padre Antonio Danoz, al que la Asociación de amigos del Camino de Santiago dedica el siguiente obituario.
Obituario dedicado a uno de los fraile del Convento Redentorista de Astorga
“El día 8 de Abril ha fallecido a los 90 años, D. Antonio Danoz, sacerdote padre Redentorista. Una gran pérdida para el Camino y para nuestra Asociación. A algunos no les dirá mucho este nombre, este ‘joven’ sacerdote de avanzada edad, comenzó a trabajar en el Camino hace apenas cinco años, después de haber pasado media vida en España, el Congo y en Venezuela.
Cuando regresó Astorga a, supuestamente descansar, palabra que no existía en su vocabulario; conoció lo que el Camino de Santiago suponía para los peregrinos, e inmediatamente se puso a nuestra disposición para trabajar con varias iniciativas.
Puso en marcha la oración a las 7 de la tarde en nuestro albergue, miles de peregrinos han pasado por ella y ya se había convertido en un referente. Acudía a los congresos y reuniones del Camino, entre ellos los de Acogida Cristiana en el Camino (ACC), siempre proactivo y aportando su sabiduría para ponerla al servicio de los peregrinos y del Camino.
Todo en él eran proyectos, el último en el Camino, fue la escritura del libro «Caminar a Santiago con el evangelio», libro editado por nuestra asociación y presentado el pasado mes de noviembre, que tanto por el formato y por supuesto, los acertados contenidos escritos por D. Antonio, acompañan al peregrino cada día como un pequeño gran recuerdo de la peregrinación religiosa.
Su legado y su fortaleza siempre nos quedarán”.
D.E.P.
