El pasado mes de marzo los socios del proyecto PirosLIFE: Generalitat de Cataluña, Valle de Arán y Fundación Oso Pardo (FOP) y representantes de la administración francesa, de Andorra se han reunido para poner en común los datos recopilados acerca del oso pardo en los Pirineos
Todos los datos avalan la buena evolución del oso pardo en el núcleo central de los Pirineos que se asienta en el Pirineo de Lleida y el Valle de Arán en Cataluña, y en la Alta Garona y Ariège franceses. En 2017 se alcanzó un nuevo récord con 41 ejemplares para esta área, y una distribución de 4000 km2. En el mismo año se contabilizaron cuatro osas paridas con siete crías.
La buena marcha del núcleo central sigue contrastando con la situación de la subpoblación occidental, integrada por dos únicos machos que se mueven por un área de 900 km2 de los Pirineos de Aragón y Navarra, y los valles franceses de Aspe y Ossau.
En 2017 se ha producido un hecho inédito: ambos ejemplares se desplazaron al otro núcleo. Posteriormente uno de ellos, Neré, volvió al occidente con un macho diferente, mientras que Cannellito permanece en el Pirineo central.
El aumento de osos en el Pirineo central continúa sin grandes conflictos sociales salvo con el sector ovino.
Por otra parte, a pesar del movimiento de los dos osos del núcleo occidental, sigue siendo imprescindible el refuerzo con hembras en este sector. Por este motivo la FOP considera positivas las recientes declaraciones del ministro francés del Medio Ambiente, Nicolás Hulot, señalando la determinación de su gobierno en reintroducir osas en la parte occidental francesa de los Pirineos.
EL VIAJE DE CANNELLITO
En 1997 el oso Neré nace en el Pirineo central de una madre eslovena liberada en Francia en el proyecto de reintroducción realizado por el gobierno francés. En aquellos años sólo quedaban en el sector occidental un puñado de machos y una sola hembra, Cannelle, la última osa autóctona. En 2002 Neré se dispersa hasta el occidente y se aparea con Cannelle, naciendo de esa unión Cannellito en enero de 2004. Diez meses después su madre es abatida en Francia. Cannellito se convierte en el único portador de los genes de los osos autóctonos del Pirineo. Neré y Cannellito quedaron solos en este sector y desde entonces hasta ahora, 14 años después, no se había detectado que ninguno lo abandonara.
En 2017, el análisis genético de pelos y excrementos ha mostrado que ambos visitaron el Pirineo central y que posteriormente hubo un viaje de regreso, pero inesperado. Neré ha vuelto con un macho que no es su hijo y Cannellito ha permanecido en el sector central.