Ocurrió en el noroeste de Rusia, y los vecinos no podían dar crédito a lo que veían. Un ciudadano ruso borracho estaba llevando a cabo un alunizaje con un tanque en una tienda de licores. Unos minutos después, y poco antes de que fuera arrestado, el hombre conseguía su objetivo: una botella de vino.
Como se aprecia en las imágenes, el tipo había robado un vehículo blindado y lo estrelló contra la ventana de una tienda, destrozando por el camino un coche cercano. El incidente tuvo lugar en la ciudad de Apatity, dentro del Círculo Polar Ártico.
Después de romper la ventana del local, el sospechoso salió del tanque y se dirigió a la tienda, donde, según los informes policiales, robó una botella de vino. De hecho, los oficiales lo arrestaron llevando la bebida en la mano.
Más tarde se supo que el sospechoso era reincidente. El tipo había robado un vehículo pesado a principios de enero, haciéndose con un camión Kamaz de una instalación de una sucursal local de la Academia Rusa de Ciencias.