Esta es la trágica y conmovedora historia de una paloma leonesa que vivió la cuarentena en el patio interior de una casa de León sufriendo una terrible tragedia.
Historia de una paloma y un palomo leonés
La la peculiar historia que nos envía una leonesa de 66 años asegurando que gracias a esta historia que día a día vivió desde su ventana, tuvo al menos un entretenimiento los últimos días de cuarentena.
«La paloma y el palomo construyen el nido entre los dos. Ramita a ramita, pajita a pajita y en un lugar que parece seguro y resguardado.
Una vez terminado el nido, que a mi juicio no es muy seguro ni confortable, empezó la historia de la pareja.
Cada día en más de una ocasión el palomo daba a la paloma fuertes arrumacos que supongo simbolizaban cariño y afecto hacia su pareja.
Las palomas son una pareja para toda la vida
Dicen que las palomas que encuentran una pareja, será una pareja para toda la vida. No son animales de un aquí te pillo aquí te mano. Son capaces establecer una relación de por vida.
Y así, día a día el palomo cuidaba de su amada y del nido porque éste, fue sin lugar a dudas quien en las frías noches de lluvia, guardó y cuidó el nido mientras ella descansaba en alguna parte no muy lejos de el.
Además de colaborar en el cuidado del nido, también cuidó durante días que su paloma estuviese bien, llevándole ramitas e incluso algo para comer mientras ella tenía el turno.
Como buen macho, él siempre se mantuvo firme y seguro y nunca permitió que algún animal se acercase o molestase a su amada.
Después de varios días de apareamiento, de incubación y de cuidado de su nido. Esta peculiar pareja de aves obtuvieron su tesoro, su primer huevo.
Normalmente las parejas de palomas suelen tener al menos dos huevos seguidos, separados por uno o dos días y, como todas las aves, cuidan de sus huevos y los defenderán a toda costa.
Así que posturita para aquí, posturita para allí. Cambio para un lado, y cambio para el otro, llegó el momento tan esperado para ellos como para mi que día salía al balcón de mi cocina para ver los avances.
Cerca de 12 días tras el período de apareamiento que creo duró 3 días, tardó la hembra en poner su primer y único huevo pasados 12 días. Y digo único porque lo que ocurrió después fue una gran tragedia.
Ese primer y único huevo, fue cuidado por ambos con mucho cariño y delicadeza. Movían el huevo de un sitio a otro del nido, se cambiaban de puesto para que ambos descansaran.
Un huevo que calentaron y mimaron durante dos días a pesar de que uno de ellos llovió toda la noche.
La tragedia
Pero mientras trataban de reforzar el nido, tal vez por si volvía a llover… sucedió algo realmente impensable, por lo menos para mí.
Tan solo un día después de haberlo puesto, de haber puesto ese huevo que puedo asegurar, les llevó un gran esfuerzo día a día noche a noche.
Sucedió la tragedia para la pareja de palomas… Algo que aunque no pude ver en el instante en que sucedía, pude imaginar.
El huevo se precipitó accidentalmente al vacío y la paloma y el palomo desaparecieron sin más, sin terminar su puesta, sin saber cómo sería la cría. Lo único que me quedó fue la estampa desde mi balcón de las pequeñas cáscaras en el suelo de mi patio interior.