La reserva de Anciles en Riaño ya tiene nuevos habitantes, después de los bisontes, nueve pottokas han sido los siguientes en desembarcar en las montañas leonesas.
Estos caballos son propiedad de la True Nature Foundation, con la reintroducción de esta especie se pretende crear una reserva de primera clase en Anciles, todo el proyecto es desarrollado por la propia fundación y el Ayuntamiento de Riaño.
LOS POTOKKA
Pottoka, voz del euskera que significa pequeño caballo, es el nombre con el que se conoce una raza de Equus caballus de pequeña envergadura o poni, que habitaron casi sin cambios, desde el Paleolítico y hasta la actualidad, los territorios montañosos de la cordillera Cantábrica, en la península ibérica y de los Pirineos en ambas vertientes.
A pesar de que la palabra pottoka en euskara sirva para denominar cualquier cría de animal, empezó a utilizarse para denominar a las crías de caballos y finalmente se ha adherido a esta especial raza.
Por ello, pueden ser el testimonio de los caballos de la prehistoria, raza que ha perdurado hasta día de hoy y cuenta con carácteres zootécnicos especiales.
La pottoka ha tenido varios usos a lo largo de la historia. Es un animal bien constituido, tiene medidas intermedias y proporcionadas y cuerpo musculoso y fuerte. De carácter, en cambio, son rápidos, fieles y muy resistentes.
Por todas estas características ha sido utilizado para varias funciones a lo largo de la historia: la monta, la caza y las guerras, tira del carro y trabajos agrónomos, tira de los vagones mineros, siembra de granos, para carne (cruzado con los caballos burguete), exportaciones extranjeras (ejército de la India) y últimamente aparte de ser utilizado para mantener limpios los prados y las montañas.