Un leonés tiene que esperar 138 días para ir al traumatólogo

Mejor que no te rompas algo y tengas que ir al traumatólogo, casi tendrás que esperar medio año. Con la Sanidad en el punto de mira y varias huelgas sanitarias en el país, la situación no es mejor en la provincia de León. Los datos de la propia Junta de Castilla y León muestran un incremento en la lista de espera. Así, para acudir a la consulta del traumatólogo u oftalmólogo un leonés debe esperar una media de 138 días, es decir algo más de cuatro meses.

También son muy destacables las listas de espera para neurocirugía y urología.

«A todo esto, hay que sumar que estas listas suelen estar maquilladas de diversas maneras, y que para entrar en la propia lista de espera quirúrgica hay que pasar por un proceso previo de diagnóstico que, en ocasiones puede tardar más de lo que es seguro para la salud de las personas» denuncia IU de León.

Problemas en el traumatólogo pero también en Atención Primaria

Carmen Franganillo, coordinadora local de IU explica que «esto forma parte de un plan de desmantelamiento de la sanidad pública, tejido por los partidos neoliberales, para beneficiar a la sanidad privada y un modelo sanitario basado en el beneficio económico. Además, las dimisiones y la inestabilidad de las gerencias y los cargos representativos en el área de León y el CAULE no benefician en nada a los usuarios, y son causados por luchas de poder dentro del PP y dentro del propio hospital. A todo ello hay que sumar que los contratos precarios y las malas condiciones laborales no son capaces de fijar profesionales en las dos áreas de la provincia, y que desde el CAULE se suelen enviar profesionales al Hospital del Bierzo, porque allí tampoco hay suficientes.»

Por si fuera poco, desde IU denuncian los problemas que algunas personas han hecho llegar a la organización sobre Atención Primaria. En Condesa, no se puede conseguir cita en AP, para algunos profesionales, en menos de una semana, o hasta en más de quince días según el caso, mientras que en Eras, en el último mes ha habido numerosas quejas por citas «fantasma», que desaparecen solas de la aplicación, o por haberse dejado abierto el sistema de citación de la aplicación para una profesional que no estaba, citando a sus pacientes sin que fueran avisados en ningún momento de que la médica no se encontraba en el centro, lo que dio lugar a quejas escritas, o incluso les ha llegado el caso de una persona dada por fallecida en junio, a las que han anulado las citas, y no consigue que se las restauren.

La falta de personal médico está provocando problemas en la atención, que acaban con pacientes que tienen que acudir a urgencias, lo que provoca, a su vez, la saturación de las mismas.