La Villa Romana de Navatejera, uno de los monumentos más antiguos de la provincia continua a la espera de que se finalicen las obras de restauración, donde se han paralizado por causas económicas.
Se calcula que se necesita una inyección de alrededor de 300.000 euros para acometer las reformas pero que aún no hay una partida presupuestaria.
María Josefa García, consejera de cultura, visitó hace dos meses la Villa. Al ver el aspecto de este monumento y el retraso de las obras, aseguró a la ciudadanía que exigiría la ministerio que finalizase las obras de adecuación.
Pese a ello, por el momento no se ha obtenido respuesta y la Villa Romana de Navatejera sigue cerrada desde hace 30 años, pendiente de las mejoras que se interrumpieron en 2012.
Algunas de las reformas necesarias son la musealización del recinto y la retirada de la maleza que está invadiendo los restos.
La Villa Romana fue excavada y protegida a finales el siglo XIX, cuando en 1885 unas fuertes lluvias provocan una gran riada que deja al descubierto los restos de unos pavimentos antiguos que pronto se identificaron como romanos. En ese mismo año, los restos ya se excavaron durante tres meses y en los dos años siguientes se llevaron a cabo otras dos campañas.
La suerte del material encontrado durante las excavaciones es dispar. De algunos objetos no se sabe nada, otros como un busto de Aestas (el Verano), se exponen en el Museo de León. Precisamente desde 1992 la villa se adscribió al Museo de León como parte anexa al mismo y en el edificio de Pallarés se expone una maqueta que la recrea.
Digital de León