El Hospital de León ha cambiado el protocolo de acceso. Ahora se autoriza el paso a un solo familiar para acompañar a los enfermos, pero antes tienen que dar negativo en una prueba PCR.
El Hospital Universitario de León, para atajar las diferentes olas de coronavirus, ha pasado por diversas fases en cuestión de quién podía traspasar sus puertas. Esas fases han ido desde el cierre total a familiares y amigos en pleno confinamiento, hasta introducir excepciones de paso para al menos un familiar, con la condición de que entrara vestido con un EPI para despedirse de los enfermos en estado crítico. Los dos últimos años para el Hospital ha supuesto un cambio constante en cuestión de restricciones de acceso.
Cambio en el protocolo de acceso
Debido a la sexta ola, que empezó a amenazar a todo el país desde el pasado mes de diciembre, se volvió a cambiar el protocolo de acceso al Hospital leonés y, de nuevo, se empezó a controlar la entrada de los acompañantes de las personas ingresadas.
Ese protocolo se vuelve a humanizar con la bajada de casos de estos últimos días y se permite el acceso de algún familiar si el médico ve conveniente que la persona que esté ingresada requiere compañía. Este sería el caso de, por ejemplo, enfermos de edad avanzada que se desorientan o que padecen alguna invalidez, ya sea física o mental.
En qué consiste el nuevo protocolo
El nuevo protocolo de acceso permite entrar y salir a ese familiar de la habitación de su pariente, siempre y cuando se haya realizado una prueba PCR en el Hospital. En cuanto el resultado de esa prueba da negativo, se le facilita una tarjeta identificativa a dicho familiar con sus datos y en ese momento ya podía tener acceso.
La persona autorizada, tiene la libertad de salir para comer o dormir y luego volver. Si pasados cuatro días, se quiere cambiar de familiar porque la estancia del enfermo se alarga, se tendría que repetir el mismo proceso con el nuevo familiar que le sustituya.
Inés Alonso
