La Policía Nacional ha detenido en Valencia a cuatro personas en una operación en la que ha desmantelado un servicio de ‘telecoca’ 24 horas cuyo cabecilla supuestamente era el propietario de un gimnasio en el que los agentes intervinieron numerosas dosis de anabolizantes y esteroides, además de una camilla donde presuntamente se administraban así como una papelera con jeringuillas.
A los detenidos, de entre 21 y 44 años, de nacionalidad española, se les considera presuntos autores de los delitos de asociación criminal y contra la salud pública, según ha informado la Jefatura Superior de Policía. Además, a otro se le imputa también un delito de detención ilegal al supuestamente retener a una persona para saldar una deuda por droga.
Ajuste de cuentas
Las investigaciones se iniciaron en noviembre, al tener conocimiento los agentes de que una persona habría sido agredida e introducida a la fuerza en un coche y trasladada en contra de su voluntad hasta su domicilio, para presuntamente abonar una deuda que tenía pendiente por la adquisición de alguna sustancia estupefaciente.
Durante las investigaciones, los agentes averiguaron la identidad del sospechoso que presuntamente se dedicaría al tráfico de cocaína al menudeo a través del conocido método ‘telecoca’, ya que le suministraba “puntualmente” a una persona una determinada cantidad de esta sustancia, distribuida en dosis de gramo o medio, para que previa llamada telefónica, quedara con los clientes en un lugar determinado donde se realizaba la transacción.
Una vez vendidas todas las dosis –esta persona atendía 24 horas al día– volvía nuevamente a casa del “jefe” para entregarle el dinero conseguido con las ventas y recibir una nueva remesa. Los policías pudieron determinar que el principal sospechoso regentaba un gimnasio en el que probablemente se estuvieran suministrando sustancias dopantes.
Gimnasio, centro de operaciones
Como consecuencia de las investigaciones, los agentes han detenido a cuatro personas y realizado tres registros en los que se intervinieron casi 35 gramos de cocaína, 16 gramos de corte, tres balanzas, 11 teléfonos móviles, un machete, 1.600 euros, así como numerosos dosis de anabolizantes y esteroides, la mayoría en el gimnasio, con anotaciones de nombres de personas.
En el gimnasio se localizó una habitación donde había una camilla para supuestamente administrar las sustancias por vía intravenosa o muscular, ya que también se encontró una papelera con jeringuillas usadas.
De los cuatro detenidos, dos con antecedentes policiales pasaron a disposición judicial, mientras que los otros dos fueron puestos en libertad tras ser escuchados en declaración y tras ser advertidos de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando para ello fuesen requeridos.