El juzgado número 1 de León ha condenado a un hombre de 65 años a una pena de diez meses de multa, unos 3.000 euros, por acosar sexualmente a una de sus trabajadoras, según ha informado Adavas que se personó como acusación particular en el caso.
Los hechos se produjeron entre 2012 y agosto 2014. El condenado, propietario del bar de una localidad del sur de la provincia en el que la víctima trabajaba como camarera, le propuso a esta en varias ocasiones mantener relaciones sexuales a cambio de dinero. Además, según recoge la sentencia, le decía que tenía que ir a trabajar en bikini, hacerse fotos desnuda para colgarlas en la pared del bar e incluso llegó a levantarle el jersey y le dio un masaje en la espalda sin su consentimiento
También se declara probado que como consecuencia de esta situación, la mujer sufrió un trastorno depresivo de carácter leve.
La sentencia prohíbe al condenado aproximarse a la mujer, a una distancia inferior a 100 metros, de su domicilio, lugar de trabajo y cualquiera en que se encuentre, y de comunicarse con ella por cualquier medio durante un plazo de dos años.