Una denuncia de Miguel Galán fue la que abrió el denominado «caso Haití» por el presunto desvío fraudulento por parte de Villar de ayudas a cooperación; también una denuncia suya por fraude electoral fue la que desembocó en la destitución del propio Villar, y ahora es también Galán el artífice de la investigación a Rubiales por el presunto intento de saldar la deuda de la reforma de su casa con fondos de la AFE.
La querella, que el juzgado solo ha admitido como denuncia, la presentó Galán el pasado 6 de julio y la investigación se abrió el pasado miércoles. La primera decisión del juez ha sido tomar declaración a Yasmina Eid-Macheh.
Lo hará en calidad de testigo el próximo 12 de septiembre. La arquitecto tendrá ese día la oportunidad de confirmar o desmentir lo que ella le manifestó a Miguel Ángel Galán en unas conversaciones que fueron grabadas por el presidente de Cenafe y que han sido aportadas junto a la denuncia.
En una primera conversación telefónica, Eid-Macheh asegura que Luis Rubiales «intentó que entráramos en un juego sucio para pagarse la casa». Y en un posterior encuentro, ya cara a cara y en presencia de la arquitecto, Juan José García, ambos detallan cómo se produjo el pago de 28.000 euros y la presunta petición por parte de los entonces gestores de la AFE de que devolviera el dinero y aceptara que otro arquitecto firmara el proyecto para que nadie pudiera relacionarla con la reforma de la casa del actual presidente de la Federación Española de Fútbol.