El precio de la vivienda baja durante este año 2020, después de cinco años en una tendencia alcista y con un mercado saturado.
La vivienda sufre el primer descenso interanual en cinco años ,desde el tercer trimestre de 2015 exactamente, según datos de la tasadora Tinsa, que subraya que los precios han bajado el 1,6% durante la crisis sanitaria, entre el primer y el tercer trimestre.
Por el momento los mayores ajustes se han producido en las zonas de interior de la Península, y han superado el 8% respecto al primer trimestre en Castilla y León, Aragón, y Extremadura. Aún así, Funcas, el instituto investigador de las antiguas cajas, prevé un impacto “muy inferior” al de la anterior crisis: estiman que esta vez el descenso será más moderado, entre el 5% y el 8%.
Pero las crisis se generan cuando se hace un abuso sobre un sólo activo. No estamos ante las mismas condiciones que hace 12-14 años, cuando explotó la burbuja inmobiliaria y se construían 700-800.000 viviendas cada año (ahora se construyen menos de 100.000). El stock de vivienda nueva es ahora de unos 460.000 en todo el territorio nacional.
El precio de la vivienda baja y sube el alquiler
El precio de la vivienda se ha depreciado en un 5,8% en Madrid y un 4,3% en Barcelona en los últimos meses. Pero no sólo en las grandes metrópolis se siente el inicio del ajuste: los precios han caído más de un 8 %, en Extremadura, Aragón y Castilla y León.
Hay que tener en cuenta la diversificación de inversiones. La propiedad inmobiliaria es un activo más y su precio, como en toda economía de libre mercado, ni siempre sube, ni se mantiene, ni es valor seguro, ya que fluctúa., y su rentabilidad también.
Si baja la renta, no hay transacciones, y sin transacciones los precios bajan. El mercado, casi siempre, se autorregula. Y esto es sólo el comienzo de la mella de la crisis sanitaria.
La oferta de pisos en alquiler se ha duplicado respecto a hace un año, y está bien que se incremente la oferta pero sería mejor incentivar a los propietarios de los pisos a alquilarlos.
Urge una ley contra la «okupación», así como mejorar la seguridad y estabilidad jurídica de los alquileres que empezar a forzar a alquilar y limitar precios, ya que los propietarios temen una intervención de los alquileres.