Una mujer consigue que Hero y el Pozo ayuden a las familias de los Alcázares tras el paso de DANA. Esta vecina anónima ha sorprendido con su generosidad y ha demostrado que aún quedan héroes en la sombra.
Las tormentas y fuertes lluvias que trajo DANA a la zona de Levante ha destrozado muchas casas.
Las fuertes lluvias provocaron inundaciones en diferentes zonas de Murcia, Alicante y Valencia, haciendo que las calles pareciesen ríos, incluso se cobraron la vida de varias personas.
En los Alcázares (Murcia) solicitaban durante este fin de semana ayuda para restablecerse. Principalmente, y como en los casos de Emergencia, pedían ayuda para los niños que no tenían potitos para comer, ni biberones, cunas, ropa de cama o ropa para vestirse.
Una vecina anónima de San Pedro del Pinatar, un pueblo vecino de los Alcázares, tuvo una idea que ha ayudado a muchas familias: escribir a las grandes empresas.
Aunque esta vecina pensó que no recibiría respuesta, se ha convertido casi en un héroe anónimo para muchas personas.
El pasado lunes, la mujer escribió un email a la empresa de Hero, una marca que trabaja principalmente con alimentos para los más pequeños de la familia. Ella les explicó la situación de emergencia y les pidió ayuda.
Para la sorpresa de esta vecina, la empresa respondió a su petición, no solo contestó el mensaje diciendo que no tenían conocimiento de esa situación, sino que ese mismo lunes por la noche llegó al polideportivo de los Alcázares un camión lleno de potitos.
Además, la rápida respuesta de la empresa murciana de Hero, animó a esta mujer a contactar con otras empresas de la región, como El Pozo, para lograr la máxima ayuda a sus vecinos.
Esta vecina anónima, viendo la respuesta, se lanzó y también escribió a la empresa El Pozo y a una empresa de limpieza y cuidado personal. También tuvo respuesta y enviaron su ayuda de manera inmediata a las familias afectadas por DANA.
Gracias a esta vecina de San Pedro del Pinatar (Murcia), muchas familias han conseguido ayuda en los Alcázares.
A veces, hay que intentar aportar nuestro granito de arena, que para otras personas puede ser su salvación.