Durante esta semana han saltado las alarmas al conocer el caso de un adolescente que ha tenido que ser hospitalizado por su adicción al videojuego Fortnite, estos hechos ocurren en Castellón y ha sido totalmente necesaria la ayuda de los profesionales para su recuperación
El primer caso clínico en el mundo de un menor ingresado
Se trata del caso de un joven con un alto rendimiento académico. La adicción al videojuego Fortnite actúo como reguladora del grave malestar provocado por la pérdida de un familiar y la ansiedad generada por el incremento del nivel de exigencia en sus estudios, tal y como señala el equipo médico integrado por profesionales del Hospital Provincial de Castellón, la Universitat Jaume I y el Hospital General Universitario.
Síntomas como aislamiento del menor en domicilio, rechazo a todo tipo de contacto social, desinterés por su entorno, restricción de actividades, absentismo escolar, alteraciones del ritmo del sueño son los presentados en este caso. El estudio científico advierte acerca de la necesidad de prestar atención a este tipo de síntomas de los cada vez más jóvenes, dada la alta vulnerabilidad que supone la «la falta de maduración en las funciones ejecutivas y cognitivas durante la adolescencia».
La importancia del apoyo profesional y parental
El equipo médico alerta que la generalización del uso de nuevas tecnologías ha puesto sobre la mesa los riesgos del uso inadecuado de los videojuegos. Ante signos de adicción como estos es necesario tratamiento especializado y multidisciplinar en aquellas personas estos problemas de comportamiento.
Las alertas más habituales que deben tener en cuenta por padres y madres pueden ser: el aislamiento del menor, que progresivamente descuida las relaciones con su entorno y sus responsabilidades personales, la incapacidad para limitar el tiempo dedicado al juego que va más allá de su tiempo de ocio, jugar cuando se debería estar durmiendo, y la resistencia a abandonar o limitar ese comportamiento.
Pero estos no son los únicos, ya que también convierten, en este caso, el videojuego Fortnite como una prioridad en lugar de un simple hobby. Además podemos ver como las personas que sufren adicción a los videojuegos pueden pasarse durante horas delante del ordenador o la consola ya que pierden la noción del tiempo, llegando incluso a sacrificar horas de sueño y descanso solo para poder jugar. Todos estos síntomas sin duda tienen unas consecuencias muy grandes y preocupantes tanto para la salud física como mental de las personas que lo sufren.
El caso del videojuego Fortnite
El videojuego Fortnite es potencialmente muy adictivo ya que impone plazos para la consecución de determinados retos. Además, las retransmisiones en vivo de estrategias comentadas por los propios jugadores, resultan un espectáculo en sí mismo que también coadyuva en dicha adicción.
La Organización Mundial de la Salud alerta que los jóvenes son las víctimas principales de la adicción a los videojuegos y asegura que este trastorno genera “un patrón de comportamiento” que provoca que se priorice “el juego sobre otros intereses de la vida y actividades diarias” de forma escalada y persistente, y ello a pesar de que las consecuencias negativas para el menor se suceden. Todo ello señala la OMS puede dar lugar a un «deterioro significativo a nivel personal, familiar, social, educativo, ocupacional«.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció hoy que la adicción a los videojuegos es un desorden de salud mental, al incluir esta problemática en la Clasificación Internacional de Enfermedades, una decisión que fue relativizada por especialistas en salud y juegos. pic.twitter.com/fUhDmr3gJB
— jorge héctor santos (@santosjorgeh) June 19, 2018