Quitan el gel de manos de una cárcel porque las internas se hacían cubatas.
Así es, la Dirección de este Centro Penitenciario decidió retirar los dispensadores de hidrogeles de la prisión.
Todo comienza cuando, hace tan solo una semana, la prisión instaló dispensadores de gel desinfectante en las zonas de mayor riesgo. El objetivo, como es obvio, utilizar el gel de manos como medida de protección ante el contagio de coronavirus dentro de la prisión y para el uso de internos y trabajadores.
Sin embargo, estos geles han tenido que ser retirados de inmediato. El motivo no es otro que el aviso de los funcionarios de la prisión al dar la voz de alarma cuando sorprendían a un grupo de internas de ese módulo ebrias tras consumir cubatas los cuales habían estado preparándose en la biblioteca del citado módulo de mujeres.
Las internas utilizaban el gel desinfectante de manos con el fin de preparar bebidas alcohólicas. Lo hacían mezclándolo con refrescos de cola.
Los funcionarios que trabajaban en ese turno y en ese módulo sorprendían a las internas bajo los efectos del alcohol y preparándose más cubatas en la biblioteca.
Según informa la Cadena Ser los hechos se han producido en la prisión de Brians I, la cual se encuentra ubicada en la Carreta de Martorell a Capelades, en la provincia catalana de Barcelona.
La Chicha
En el lenguaje o argot penitenciario «La Chicha» es el nombre que se le da a la bebida alcohólica que los internos realizan macerando fruta de forma clandestina.
En un brebaje rudimentario. Además a apenas tiene graduación alcohólica, sin embargo la elaboración de esta bebida es un hecho que en mayor o menor medida, todos conocen en el interior de las prisiones.
Los internos la elaboran destilando alcohol a partir de dejar fermentando la fruta que obtienen en las comidas.