El albañil retirado fue a las dependencias de la cárcel pidiendo el ingreso voluntario
Un albañil retirado solicita ingresar en la cárcel de Palma debido a que no tiene dinero para pagar su alquiler y alimentos. José Miguel, quien sufrió un infarto y lucha contra la depresión y la ansiedad, afirma que no puede trabajar y que su situación económica es insostenible. Vive en una pequeña caravana en un terreno de sus padres y se alimenta de los huevos y la carne de pollo que cría. Además, recoge chatarra para ganarse la vida.
Ante esta situación, José Miguel ha decidido pedir su ingreso en prisión, donde al menos tendría comida, un lugar donde dormir y televisión. Sin embargo, su abogado ha señalado que se trata de una performance que José Miguel hace deliberadamente para luego colgarlo en redes sociales, y que debería recurrir a Servicios Sociales o a alguna ONG para buscar ayuda.
Por otro lado, el psiquiatra José Carlos Fuertes ha determinado que es poco probable que José Miguel obtenga una incapacidad, ya que tendría que gastar mucho dinero en un procedimiento judicial que podría tardar hasta dos años. La noticia ha causado sorpresa y preocupación entre la población, ya que evidencia la difícil situación económica y de exclusión social que enfrentan algunas personas en la sociedad actual