Roger Federer dijo adiós al deporte de sus amores, donde no solo se convirtió en uno de los más grandes de la historia si no que también forjó grandes amistades con los mejores tenistas del circuito demostrando que las rivalidades se quedan en la pista. El tenista suizo confirmó su retirada hace prácticamente dos semanas, sorprendiendo a todos aquellos que siguen el deporte rey de la raqueta, siendo una noticia inesperada e indeseada por los amantes del tenis debido a que soñaban con volver a ver a Roger levantando un último Grand Slam antes de su retirada.
El último baile del «reloj suizo» tenía fecha y hora, siendo la Laver Cup, torneo que él mismo fundó, el lugar donde quería retirarse acompañado de sus máximos rivales y cómo no, celebrándola en Londres, ciudad que tantas alegrías le ha dado a lo largo de su carrera. Roger Federer quería tener un «último baile» junto a su némesis, su máximo rival en la pista, Rafa Nadal, con el que quiso disputar el último partido de su carrera en un encuentro de dobles frente a Francis Tiafoe y a Jack Sock.
Este fue el final deseado e impredecible para todos los amantes del tenis, que vieron, una vez más, como se admiran el de Basilea y el de Manacor a pesar de la rivalidad que siempre ha existido entre ambos tenistas. Ver a Roger y a Rafa reír en pista y hacer sus propias estrategias en dobles, donde claramente no son especialistas, nos llevó directamente a la Laver Cup de 2017 donde jugaron un dobles por primera vez. Pero esas sonrisas que se esbozaban en sus caras pasaron a un segundo plano cuando Roger comenzó a hablar de su retirada, momento en el que todos rompieron a llorar, siendo un momento muy conmovedor.
Rafa Nadal mostró al mundo su humanidad y humildad una vez más, rompiendo a llorar en un discurso donde Roger Federer tampoco pudo contener las lágrimas al hablar de su trayectoria y de cómo llegó a tomar esta dura decisión. Una imagen conmovedora que lo llegó a ser incluso más al ver a ambos llorando mientras se daban la mano viendo las imágenes de la carrera de Roger y de su «último baile» mientras la artista británica Ellie Goulding entonaba la emocionante canción «Still Falling For You».
Un día triste para el mundo del tenis que nunca volverá a ver a un tenista como Roger Federer sobre la pista de tenis, que tenga tanta calidad y tanta humildad sumado a lo gran persona que es. El «Big Three» tiene los días contados, por lo que, tendremos que disfrutar de Rafa Nadal y de Novak Djokovic el tiempo que podamos porque, por desgracia, no son eternos.
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