La muerte de Mihajlović ha dejado huérfano al mundo del fútbol
La muerte de Mihajlovic el pasado viernes provocó que el mundo del fútbol se quedara ‘de piedra’ ante tal triste noticia. El zaguero serbio llevaba varios años luchando contra la leucemia, por lo que tuvo que retirarse de los banquillos para centrarse en su recuperación. Pero Mihajlović no pudo ganar la batalla a esta terrible enfermedad y falleció a los 53 años en Roma, ciudad donde pasó gran parte de su vida y donde fue un ídolo en la Lazio.
Con una amplia trayectoria futbolística a su espalda, Mihajlović ha sido, para muchos, el mejor lanzador de faltas de la historia, pasando incluso por encima de jugadores como Roberto Carlos, Juninho Pernambucano, Leo Messi, Pirlo o David Beckham. Un zaguero que tuvo una exitosa carrera en la Lazio, donde ganó varios títulos, y que luego continuó como entrenador en importantes entidades italianas como la del Bolonia, la Fiorentina, la Sampdoria, el Milan, el Torino y el Bolonia.
Más de 2.000 personas acudieron al funeral de Mihajlović
Era sabido por todos que Mihajlović era un hombre querido en Italia, quedando demostrado en su funeral, momento en el que más de 2.000 personas se congregaron en los aledaños de la Basílica de Santa María de los Ángeles, ubicada en el corazón de Roma. Acudieron varios de sus excompañeros, como fue el caso de Totti y de Rossi, acompañados de las plantillas de la Lazio y del Bolonia, que fue el último conjunto al que entrenó.