Honda deja la competición en la fórmula 1 a finales de 2021 provocando un auténtico Tsunami mediático dentro del paddock. Y es que Honda es el principal suministrador de motores de Red Bull y Alpha Tauri, que de momento, aún siguen en la competición. Además, como consecuencia de este anuncio, el motorista nipón da por terminada su colaboración con Red Bull Racing.
Ahora viene una situación bastante complicada, a la vez que impredecible para el año 2022 en el mundo de la fórmula 1, ya que hay un proveedor menos para suministrar motores a los coches de la parrilla.
Aunque también es cierto, que los motoristas actuales podrían ser capaces de cubrir todas las necesidades de la Fórmula 1. Aunque si hubiera algún candidato, se sabrá antes del 1 de Enero de 2021, fecha tope para la presentación de solicitudes a la FIA (Federación internacional del automóvil).
Las razones de la marca para tomar esta decisión, son dos: los costes y que los motores son poco innovadores y complejos. Además, según comentan los de Sakura en el comunicado oficial, se han dado cuenta de la transformación tan radical por la que pasa la industria del automóvil. Un profundo periodo de transformación que sucede una vez cada 100 años.
Su salida pone en duda todo el proceso iniciado en 2014 con la era híbrida. La FIA y la F1 no han sido capaces de generar una plataforma interesante para los fabricantes, aunque aún quedan Mercedes, Renault y Ferrari.
Si la categoría reina no goza de su mejor momento, ahora además se suma la pérdida de un fabricante tan importante como el nipón. Cada vez queda más claro que el actual reglamento solo suscita interés en unos pocos fabricantes.
Se va honda y casi Renault de la categoría por excelencia del automovilismo. No solo indica que no es tan rentable, sino que la toma de decisiones fue pésima. ¿Se irá la fórmula 1 para no volver?