El robot que inventó Leonardo da Vinci hace más de 500 años
Leonardo da Vinci es uno de los mejores escultores de todos los tiempos y cada vez que se le relaciona alguna creación es fascinante lo que se puede descubrir del artista. Cuanto más estudiamos y más curiosidades descubrimos de este genio del Renacimiento, más motivos nos da para admirar cuanto produjo. Y es que Leonardo fue pionero en muchos asuntos, pero pocos podríamos imaginar que también se encuentra entre los precursores de la robótica.
A finales del siglo XV construyó un caballero mecánico que, portando una armadura de placas, podía sentarse, levantarse, mover los brazos, la cabeza y hasta emitir sonidos, una gran innovación en la época. Es posible que se tratara de una especie de atracción para sorprender a los invitados de las fiestas organizadas en su lujosa casa. Leonardo da Vinci en 1495 diseñó algo con lo que dejar boquiabiertos a todos cuantos se sentaran a la mesa junto a la orgullosa y divertida mueca que ofrecería Ludovico Sforza a sus invitados.
El artista fabricó el primer robot con forma humana de Occidente. El caballero autómata, como así se conoce, fue una figura mecánica pertrechada con una armadura según la moda germánica del momento que, gracias a un sistema interno con engranajes y poleas, podría imitar ciertos movimientos humanos. No podemos saber con exactitud cómo era este robot del Renacimiento, puesto, que solo tenemos unas pocas notas de Leonardo, pero los especialistas han procurado reconstruir modelos especulativos con un interior de madera, cuero y metal.
Este invento fue desconocido hasta que en 1.950 el historiador y especialista en Leonardo da Vinci, Carlo Pedretti, descubrió las páginas que mostraban el proyecto y saco a la luz el primer robot del mundo.