En esta ocasión te traemos una receta espectacular para que puedas preparar tus donuts caseros como si fueran los de toda la vida. Ese sabor y esponjosidad característicos tan difíciles de conseguir y que tanto te gustan. Con esta receta tendrás un desayuno o merienda perfectos para estos días de invierno en los que te apetece darte un capricho.
Ingredientes para hacer los mejores donuts caseros
Con estas cantidades de ingredientes vas a poder obtener unas 25 unidades aproximadamente. Claro que, depende de si te gustan más gorditos o tamaño normal.
- Harina de fuerza 500 gramos
- Azúcar 70 gramos
- Mantequilla a temperatura ambiente 50 gramos
- Levadura fresca 25 gramos
- Leche entera 150 mililitros
- Agua 100 mililitros
- Una cucharadita pequeña de esencia de vainilla
- Un huevo
- Una pizca de sal
- Aceite de girasol para freír
Para el glaseado que va sobre nuestros donuts
- 125 gramos de azúcar glass
- Tres cucharadas de agua
- Media cucharada de zumo de limón y un poco de ralladura, sin la parte blanca.
- Colorante alimentario, aunque es opcional, depende de qué aire quedamos dar a nuestros donuts. También podemos bañarlos con chocolate con leche especial para postres.
Preparación
En primer lugar, mezclamos la leche templada con el agua y disolvemos bien la levadura. En otro bol, colocamos azúcar y sal y las mezclamos bien junto con la harina y hacemos un hueco en el centro para añadir la mezcla líquida anterior.
Una vez que está todo bien integrado, incorporamos poco a poco la mantequilla, el huevo y la vainilla. Mezclamos bien y amasamos con las manos durante unos 12 minutos para que se integren bien todos los ingredientes.
No te preocupes si la masa está pegajosa, puesto que es normal. Eso sí, no añadas más harina porque si no te van a quedar muy duros una vez fritos.
Haz una bola con la masa y déjala reposar tapada con film transparente un poco más de dos horas en un lugar cálido alejado de corrientes de aire.
Pon la masa en la superficie de trabajo espolvoreada con un poco de harina y desgasifícala, pero sin amasar. Después ya puedes dar forma a los donuts caseros y déjalos reposar en la bandeja del horno cubiertos con un paño de concina, sobre hora y media.
Ya los puedes empezar a freír en aceite caliente pero no en exceso, para después colocarlos sobre papel absorbente. Después puedes preparar el glaseado y bañarlos colocándolos sobre una rejilla para que caiga el exceso de producto. Aunque este paso, depende de gustos, puesto que es posible que prefieras bañarlos en chocolate con leche.