En la provincia de León podemos encontrar un sinfín de monumentos, rincones bonitos, excursiones, una rica y variada gastronomía, pero también tenemos juegos que son de origen leonés.
Los cuáles muchos de ellos actualmente no se juegan, o incluso los hemos olvidado, pero no por ello son menos maravillosos. Así que hoy vamos a hacer un viaje al pasado para saber más sobre nuestras tradiciones.
Lucha leonesa
No se concibe habar sobre deporte en León, sin mencionar la lucha leonesa. Ya que esta actividad deportiva la tenemos muy arraigada, y es la más tradicional de todas. Cabe señalar, que la práctica de la lucha leonesa se sigue practicando a pesar de los años en León.
En ella, dos contrincantes los cuales se encuentran en un corro, se tienen que agarrar el uno al otro por un cinturón de cuero. El objetivo es sencillo, conseguir derribar al adversario agarrando solo el cinturón. Y el vencedor es aquel que consigue derribar en dos ocasiones al rival.
Bolos leoneses
Dentro de los deportes tradicionales también se encuentran los bolos leoneses. Los cuáles todavía en muchos pueblos, pertenecientes a la montaña leonesa, se sigue practicando. Sobre todo se juega durante las fiestas patronales del pueblo.
Una de las mayores peculiaridades que tienen los bolos leoneses, es que la bola con la que se juega no es redonda, tiene forma semiesférica. Del mismo modo, el objetivo de los bolos leoneses además de lograr conseguir el mayor número de puntos posible, se tiene que hacer intentando que la bola semiesférica recorra un camino determinado.
El juego de la rana
Este es uno de los juegos de origen leonés por excelencia, ya que todos, desde los más mayores hasta los más pequeños de la casa hemos intentando meter las fichas por la boca de la rana. Sin embargo, muchos desconocen que su origen es leonés.
En la rana se juega de manera individual o como parejas. El objetivo del juego es lanzar las fichas hacia el tablero de la rana e intentar colarla por alguno de los agujeros. Cada agujero te otorga una puntuación, dependiendo de la dificultad para meter la ficha. Por lo que gana aquél o aquellos que mejor puntuación consigan.
Las chapas
En antaño el juego de las chapas se jugaba sobre todo en la época de Semana Santa. Y es otro de los juegos al que todos alguna vez en nuestra vida hemos jugado, y que sólo con escuchar su nombre nos trae muy buenos recuerdos.
Este es un juego que no tenía fin, ya que podías pasarte horas jugando a él. Es un juego de apuestas, cada uno de los participantes apuesta si al tirar las dos monedas al aire va a salir cara o cruz. La persona que acierte, será la que gana la apuesta, por lo tanto la que gana el juego.
Amanda Arroyo