Estos son algunos de los impuestos que tienes que declarar por algunas acciones cotidianas de tu día a día pero que quizá no sabías.
El IRPF
El impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas o IRPF es un impuesto personal, progresivo y directo que grava la renta obtenida en un año natural por las personas físicas residentes en España. Así pues, es una figura impositiva perteneciente al sistema tributario español.
Existen determinadas acciones del día a día que muchos desconocen pero que deben declarar, algunas de ellas pueden incluso resultar sorprendentes para muchos
Por compras de segunda mano en Internet
Igual que el IVA debe aplicarse a los productos nuevos, los productos de segunda mano tributan por el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales o ITP.
Las donaciones, el dinero de boda y las ayudas de familiares o amigos
Cualquier entrega de dinero sin excepción y desde un euro. Con indiferencia de su procedencia.
Por vender de segunda mano en Internet
De todo lo que vendas, deberás pagar impuestos mientras que el valor de la venta supera al de la compra.
Premios y sorteos
Los premios en sorteos y rifas tributan y una parte se la lleva Hacienda. Se incluye el bingo.
Los servicios a tus amigos…
Si tu vecino te pide que le arregles por ejemplo su portátil, le montes unos muebles… eso también se debe declarar.
Cambiar titularidad del coche: bienvenido al mundo de las tasas
Las tasas son un tipo de tributo especial y se diferencian de los impuestos al uso en que no pueden superar el coste del servicio.
Si tienes una casa, un coche, una moto…
Existen impuestos más conocidos que se pagan sólo por el hecho de poder disfrutar de tus pertenencias. Si tienes coche, moto o cualquier vehículo y quieres circular con él tendrás que pagar la ayuntamiento el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM),