A la hora del baño lo habitual es utilizar agua, jabón y esponja. ¿No? Pues según los estudios no es necesario «frotar» para lavarse. Hay que olvidar lo de «eliminar la mugre» frotando. Los especialistas aseguran que es importante no frotar demasiado la piel para evitar restregarse. El tema va más lejos. Los dermatólogos coinciden en que es mejor evitar las esponjas. Aunque el tema depende de rutinas.
La piel exfolia de modo automático por lo que la esponja no sería necesaria para este fin. Por el mismo motivo no es necesario utilizar estropajos, exfoliantes o piedra pómez. Destierra las esponjas fuertes y ásperas de tu rutina de aseo.
Mejor una esponja suave y blanda
Si eres fan de la esponja hay que utilizarla de modo suave. Por lo que es mejor una esponja suave y blanda. En caso de utilizar la esponja hay que tener en cuenta que es fundamental cambiarla a menudo, ya que puede ser un nido de bacterias. Por este aspecto es mejor utilizar una manopla ya que es más higiénica al poder lavarla en la lavadora.
Otra recomendación es el uso de jabón neutro y con una ducha al día es más que suficiente, de otro modo la piel corre el riesgo de deshidratarse.
