El coronavirus y el consumo de energía en nuestros hogares
Durante las últimas semanas y tras la declaración del estado de alarma, miles de españoles se han visto obligados a quedarse en casa. Este necesario confinamiento, sin embargo, no solo ha alterado nuestros hábitos cotidianos, sino también nuestra manera de consumir.
Así y en términos globales, el consumo energético ha descendido notablemente fruto de la paralización de parte de la industria. La caída ha afectado en mayor medida a los grandes núcleos urbanos como Madrid y Cataluña.
Tanto es así que es allí donde se han llegado a registrar bajadas de más del 10%. Esto, al mismo tiempo, se ha visto reflejado en una bajada de las emisiones de CO2 a la atmósfera. Las restricciones de movilidad y el descenso de traslados aéreos también han contribuido positivamente. Y el consumo de gasloina se ha reducido hasta un 82%.
El gasto de energía de las familias se dispara
Sin embargo, a pesar de esta reducción global, en el caso de las familias ha ocurrido todo lo contrario. Como consecuencia durante estos meses sufriremos un encarecimiento del recibo que rondará entre los 15 y 30 euros.
Aquí entran en juego el uso del horno, el microondas, la vitrocerámica, la televisión y otros aparatos electrónicos, que permanecen durante más tiempo encendidos. También se han modificado las pautas de consumo: ahora la demanda es mayor por la mañana.
El encarecimiento podría resultar más preocupante si cabe si tenemos en cuenta el contexto actual. Los datos revelan una creciente preocupación por la economía.
Se estima que España perderá 300.000 empleos este año como consecuencia del parón por el COVID-19.
Cómo ahorrar energía durante la cuarentena
Por fortuna existen una serie de consejos que nos permitirán ahorrar durante el confinamiento y también en términos generales. Según los cálculos, cuidar del medioambiente podría ahorrarnos hasta 2.000 euros al año.
Hablamos de:
- Renovar los viejos electrodomésticos
- Lavar la ropa a 40 grados en lugar de a 60
- Ajustar la temperatura del frigorífico
- Instalar aireadores de grifos y duchas
- Optar por bombillas de bajo consumo
- Apostar por el aislamiento para evitar pérdidas es otro punto clave (constituyen el 30% del total).
Asimismo y en especial durante estos días, es recomendable:
- Prescindir del horno y apostar por otros electrodomésticos como el microondas (gasta alrededor de un 60% menos)
- Evitar las incursiones a la nevera: cada vez que la abrimos, el frigorífico necesita recupErar su temperatura, y estamos desperdiciando hasta un 7% de la energía acumulada.
- Ajustar la temperatura de la calefacción o apagarla.
- Evitar consumos fantasmas (ahorraremos hasta un 10%).