Así es, León junto con Asturias pidieron ser un país reconocido internacionalmente a la Organización de Naciones Unidas (ONU). Aunque pueda parecer muy extraño, esta anécdota de la historia tuvo lugar en una situación excepcional que vivió España. En el contexto de la Guerra Civil Española, cuando nuestro país se encontraba dividido entre el Gobierno legítimo de España y los golpistas capitaneados por el dictador Franco, Asturias y León declararon conjuntamente su independencia.
El Consejo Soberano de Asturias y León proclamó su independencia en 1937
Corría el 24 de agosto de 1937 cuando el Consejo Soberano de Asturias y León proclamó su independencia ante el avance de los franquistas en el Frente del Norte. Acababan de tomar la ciudad de Santander arrinconando al Norte de España y separándolo del resto de la España Republicana. El Gobierno de la República se había trasladado a Valencia y el Norte quedaba desconectado de la España en la que todavía regía el Gobierno legítimo.
El Consejo Soberano llegó a acuñar moneda propia
Esta situación de aislamiento que sufría el Norte republicano propició que los poderes locales tuvieran que asumir las competencias del Gobierno de la República, del que habían quedado separados por las tropas de Franco. Belarmino Tomás fue quien se puso al frente como presidente e incluso llegó a emitir billetes, bautizados como belarminos, como él, ya que no tenían suficientes billetes al encontrarse aislados del resto de la República Española.
El Consejo de Asturias y León quería entrar en la ONU como Estado de pleno derecho
La capital de este Consejo Soberano de Asturias y León se instaló en Gijón, ya que Oviedo había sido tomado también por los golpistas. Este país de hecho pidió a la Sociedad de Naciones, la actual ONU, que le reconocieran como Estado independiente de pleno derecho para librarse del régimen franquista pero esto nunca sería aceptado. Incluso Manuel Azaña, presidente de la República Española, se disgustó con Belarmino por esto. Finalmente, este país de facto duraría tan solo 2 meses al ser invadido por las tropas de Francisco Franco.
Franco Dávila